Pinturas indias. |
El mediodía es inmundicia
o demolición de lo visto.
La rigidez solar asfixia
el pulmón de algunas preguntas
y toda impugnación es tenue ceniza.
La insoportable nitidez,
como una ternura vacía,
separa sus dalias de piedra.
En esta latitud del movimiento,
la tierra embarazada desentraña las horas,
arrastra, concibe los cuerpos,
para habitarlo todo, traspasado el abismo.
En esta latitud del pensamiento
la serpiente exaspera
cuando la vida sueña su veneno,
y la condena crece
hacia abajo como crecen los muertos.
En estas latitudes, la nostalgia
también es el desprecio
—su ala inmóvil
contiene el aire entero.