lunes, 8 de agosto de 2011

Que sea la palabra

La alegría de vivir. Picasso

“La substancia del alma es la palabra;
la palabra donde todas las cosas extensas y reales
se encienden mutuamente y de nosotros"

Luis Rosales


Que sea la palabra una esperanza eyaculada
que fecunde lo natural
con el temblor de lo inefable.

Que sea la palabra
la que abrace la lágrima
que endulza al cuerpo en su marea;
que sea el lienzo rojo
que se hunde en la piel traslúcida
―alga en el llanto innumerable.

Que sea la palabra un intervalo,
el enigma,
del equilibrio que confluye
en los vértices de tu mente.
La energía que allí mismo contenga
lo irremplazable.

Mirad esa voz
como negra hormiga
que palabra a palabra avanza,
enmudece en los bordes del corazón,
y pronuncia en el mundo
lo necesario
para que una sombra tenga estrella.

Qué sea la palabra
quien abarque la ventana
en una intensidad
que dé al Sol
la vida.

Que sea la palabra el tamiz
de los vínculos que abrazan
la voluntad de respirar,
la sed del aire solitario
en un borroso atardecer.

Que sea tu palabra quien abra el mar
para ver el secreto despiadado
de sus átomos ciegos.

Que sea la palabra el sahumerio
de una esencia soleada,
un horizonte sonreído
cuando el pinar, allá lejos, canta.

1 comentario:

El Monje dijo...

Generalmente uno entra, lee, disfruta si es del caso y sale sin más, pero tengo que felicitarle por su quehacer poético admirable. Abrazos.