miércoles, 7 de mayo de 2014
Remos altos
Il faro. Carlo Carra
Campos de lo que hubo no habido
Juan Gelman
El día surge
parecido a un navío deslumbrante;
los remos altos avanzando
por los perturbadores túneles del alba.
Y a ti te arrastran las mareas
del mar abierto a todas las escuadras.
Tu deriva persigue
el encuentro sin cuerpo con la vida,
y serán hermosos los olvidos,
sin figuraciones apenas,
como estrellas
que se apagan
con los dedos.
Lo insoportable es
no vivir el futuro que pudiste ser,
y exánimes,
rendir
las horas por crecer.
¡Ah...
estirpe de lo que no fue!
Qué desastre este torbellino
azotando los barcos
que después ya ni son
el agua que espumaron.
Qué sórdido momento,
este que detiene la carne,
que se amplía y amplía
inmóvil;
impermeable a un tiempo
que ya no has visto transitar.
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3 comentarios:
Voy a arrimarme a esta vera, José Juan, J.J, porque no se está mal entre tanto buen saber decir poético. Un abrazo.
Gracias, Isabel. Esta es tu casa.
Un bico.
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