El guerrero. Salvador Dalí
Hoy he muerto
y me acerco a la tierra recordando el presente;
la disciplina de la sombra es sereno equilibrio.
La zozobra de la nada impregna la lluvia,
la libertad de un corazón sin prisa,
como un barco paciente
ante el tedio oceánico.
Hoy he muerto
y ahora no recuerdo cosas para soñar.
Hay una tenue arena en el olvido,
donde residen todas las cosas fragmentarias:
el cuero de unos ojos,
espejos diluidos,
aves sin tránsito...
Aquí se abre el túnel;
la plomada del pensamiento atraviesa sus cauces
y cuelga la memoria su palabra ocelada;
su hálito se agita sin fulgor
...sus lánguidas ballenas
tragando el kril de los significados.
Hoy he muerto.
Qué aburrido este jueves por la tarde
en la eternidad de los signos
¿qué óxidos corroerán sus bronces?
Hoy he muerto.
Tardía, encumbrada en el delirio,
se desnuda la carne de sus huellas herméticas.
Duele esta pleamar de párpados abiertos.