sábado, 27 de agosto de 2011

El regreso de la guerra

Los cazadores en la nieve. Brueghel.

Sobre el hogar, agolpado en el rojo,
se revela el lienzo,
y reavivada, se perfila
la imagen de la negra rosa.
El helado desierto y el fuego acogedor
agrupa el retorno de los hombres.
Han hundido todos los sueños
en la última lápida,
todas las voces, todo el silencio.
Nada queda por repartir.

Afuera se alarga la brisa patinando en el cielo,
aullando el fulgor de un corazón insaciable;
miman los hombres
con profunda veneración
su guadaña arrebatadora,
la condición de su siniestro jugo.

Una mujer susurra al oído de su hombre:
–Quizá te sienta más cerca cuando te hayas ido.
Yo, obligada por la tierra
mi destino es
girar y girar...

...esperar y esperar.

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